La Selección debe encaminar su clasificación rumbo a la Copa del Mundoque se desarrollará en Rusia el próximo año. El cambio de entrenador fue una de las razones para intentar ubicar a la Argentina en los puestos que se garanticen una plaza en la próxima competición internacional y Jorge Sampaoli comenzó a realizar modificaciones para enderezar la nave.

En su primera nómina por compromisos oficiales (visita a Uruguay y recibe a Venezuela), el técnico de Casilda dejó afuera del plantel a Gonzalo Higuaín, uno de los apuntados por el público albiceleste en las tres finales perdidas de manera consecutiva. Una situación similar a la que ocurrió conEzequiel Lavezzi, quien tampoco fue tenido en cuentra por el DT.

Su lugar será ocupado por Mauro Icardi, la promesa que entusiasma a los hinchas para conformar una ofensiva incisiva junto a Paulo Dybala yLionel Messi.

Otra de las sorpresas fue el regreso de Javier Pastore, quien había sido marginado por Edgardo Bauza, al igual que Nicolás Pareja. Lo llamativo de la lista es el llamado a Lucas Biglia, quien se encuentra desgarrado y desde el Milan de Italia comunicaron que el volante estará inactivo durante un mes.

En los puestos de arquero Sampaoli confirmó la apuesta de Gerónimo Rulli, para que dispute un lugar con Sergio Romero y Nahuel Guzmán. En tanto que Javier Mascherano figura como defensor en la nueva idea del entrenador. Federico Fazio, Gabriel Mercado y Nicolás Otamendicompletan la última línea.

La población surgió en el mediocampo. La vuelta de Javier Pastore yAugusto Fernández son los nombres nuevos en el bicampeón del mundo, y la continuidad de Marcos Acuña, Eduardo Salvio, Leandro Paredes, Guido Pizarro y Manuel Lanzini inspiran la renovación. En cambio, Éver Banega y Ángel Di María son los sobrevivientes de la vieja camada.

Las variantes en la ofensiva surgiran con Sergio Agüero y Joaquín Correa, aunque la nómina se completará con los futbolistas que se desempeñan en el ámbito local.

Argentina, que marcha quinta en el camino hacia Rusia 2018 con
cuatro partidos por delante, y que espera una resolución
favorable del TAS sobre la sanción a Bolivia, que podría dejarla cuarta,
se medirá el 31 de este mes en Montevideo ante Uruguay y cinco días
después recibirá a Venezuela en el Monumental.