La Recaudación en La Rioja Desafía a la Inflación

Creció Casi un 30% en Términos Reales en Mayo
La Rioja, [Fecha] – En un escenario económico desafiante, la provincia de La Rioja ha logrado un hito significativo en su recaudación impositiva. Durante el mes de mayo, los ingresos tributarios provinciales no solo superaron la inflación, sino que crecieron un impresionante 29,3% en términos reales, marcando el décimo mes consecutivo con un aumento por encima del costo de vida.

Los datos, desprendidos del informe mensual elaborado por la Dirección General de Ingresos Provinciales (DGIP), revelan que en mayo de 2025, la provincia recaudó un total de $12.269.839.735. Esta cifra representa un salto interanual del 74% en comparación con los $7.045.943.540 percibidos en el mismo mes de 2024.

Este notable crecimiento cobra aún más relevancia si se lo compara con la inflación. En el mismo período (mayo de 2024 a mayo de 2025), el Índice de Precios al Consumidor (IPC) en la región del NOA, de la cual La Rioja forma parte, fue del 44,7%. La diferencia es contundente: la recaudación riojana se ubicó casi treinta puntos porcentuales por encima de la suba general de precios.

Los Pilares del Crecimiento Impositivo
El esquema tributario de La Rioja se sustenta en cuatro impuestos provinciales clave: Ingresos Brutos, Sellos, Automotor e Inmobiliario. El análisis individual de cada uno de estos tributos revela importantes variaciones:

Ingresos Brutos: Este impuesto, el de mayor peso en la estructura provincial, aportó $9.549.238.289 en mayo, un incremento del 59% respecto al mismo mes del año anterior.

Impuesto Inmobiliario: Sorprendentemente, este gravamen mostró un crecimiento exponencial del 306%, alcanzando los $238.317.054 en mayo.

Impuesto al Sello: Con un aumento del 296%, el impuesto al sello generó $1.855.043.670 para las arcas provinciales.

Impuesto Automotor: Si bien su crecimiento fue más moderado en comparación con los anteriores, el impuesto automotor sumó $627.240.722, con una suba del 19% interanual.

Este desempeño sostenido en la recaudación provincial es una señal positiva para la economía de La Rioja, sugiriendo una mayor actividad económica o una gestión tributaria eficaz que permite al Estado contar con más recursos para afrontar sus gastos y proyectos. La continuidad de esta tendencia será clave para la estabilidad financiera de la provincia en los próximos meses.