Tras la reunión con los gobernadores, el Presidente cambió sus planes y reforzó la cuarentena en el interior

un giro inesperado, que se resolvió ayer a última hora, después de una charla de cinco horas con los 24 gobernadores, el presidente Alberto Fernández decidió cambiar la estrategia que tenía definida para dar comienzo a una nueva etapa con mayores libertades y anunció otra fase restrictiva que afectará a 18 provincias durante las próximas dos semanas.
El Presidente fue enfático a la hora de describir el problema y apuntó contra las reuniones sociales. «Algo tenemos que hacer para limitar el contacto estrecho entre nosotros. Les pido que comprendan la dimensión del problema, les pido que nos ayuden», sostuvo Fernández durante el anuncio.

Con más de 850.000 infectados totales en el país desde marzo -y un promedio de 13.052 casos diarios en los últimos siete días- la preocupación del gobierno nacional dejó de ser el área metropolitana. «El 65% de los contagios vienen hoy de las provincias del interior», graficó el Presidente. De hecho, durante su exposición remarcó una y otra vez el trabajo que se realizó en la ciudad de Buenos Aires y en el Gran Buenos Aires.