Inés Brizuela y Doria y los contratados
La actual Intendente de la Capital de La Rioja, comenzó a delinear cuál será la función de cada empleado que depende de la municipalidad.
En ese contexto, la realidad es abrumadora, teniendo en cuenta que existe una seria de empleados no formales, es decir contratados, que no cumplen funciones y ni siquiera tienen un lugar físico de trabajo.
Existirían contratados por la municipalidad, que supera ampliamente el espacio físico del edificio y otro tanto que solo son compromisos políticos y que nunca prestaron ningún servicio.
Esta realidad, es un dilema que afronta la municipalidad y que se heredó de la desastrosa gestión de Paredes Urquiza; quien no solo no cumplió con las expectativas de mantener una ciudad ordenada, sino que además dejó una municipalidad devastada.
La actual gestión, deberá pagar un costo político a cuenta de la gestión anterior y poner blanco sobre oscuro, la realidad de cada empleados municipal. La cifra de los contratos en estado de incertidumbre ronda los 700 y hay una decisión política de cerrar la cifra sin cometer actos de injusticia.
Durante una conferencia de prensa Inés Brizuela y Doria sostuvo que
«… hay oficinas que tienen mas de 175 empleados y es imposible que puedan prestar funciones y ni siquiera entran en ese espacio…»
«Vamos a tener que reempadronar…»
«Hay gente que nos sabemos donde prestan servicio…»
«Les pido paciencia porque no queremos cometer ninguna injusticia…»
Aqui El Video de la Conferencia
— Aldo Portugal (@AldoPortugal) December 17, 2019