El Congreso de Chile acusó a Chadwick por violar los derechos humanos
El Senado de Chile aprobó una acusación constitucional contra el exministro de Interior chileno Andrés Chadwick y lo inhabilitó para ejercer cargos públicos durante cinco años por su responsabilidad en violaciones a los derechos humanos ocurridas al inicio de la crisis social. La represión y las protestas violentas dejaron un saldo de 24 muertos y cientos de heridos.
El presidente chileno, Sebastián Piñera, lamentó la decisión política que afectó a su primo, removido de su cargo diez días después del inicio de las masivas manifestaciones contra el gobierno de Piñera, el 18 de octubre. Había sido removido junto a otros siete ministros, en un primer intento del mandatario por contener la crisis social.
Distintas organizaciones locales e internacionales, inclusive la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA, denunciaron abusos de las fuerzas de seguridad y cuestionaron los protocolos de Carabineros (Policía), en especial el uso masivo de perdigones y gases lacrimógenos.
Chadwick calificó de «injusta, infundada y politizada» la acusación constitucional, aprobada con 23 votos a favor y 18 en contra, tras una maratónica jornada en la que los legisladores se extendieron para fundamentar su voto. «Jamás, ni deliberadamente o no deliberadamente, he adoptado una medida o he omitido una medida con el propósito que se pueda abusar de los derechos humanos de ninguna persona», se defendió.
Piñera también ratificó su apoyo hacia Chadwick, a quien describió como «un gran servidor público, con sólidos valores y una inmensa vocación de servicio por los demás. Y lo más importante, un hombre honesto y generoso y una persona íntegra y buena». El mandatario también enfrenta una acusación en el Congreso.
